Gran parte de las empresas intentan arreglar las cosas, en lugar de desistir de sus ideas cuando no funcionan. Reconocer un error y no hacer nada al respecto es malo para nuestra empresa. Una estrategia mejor es reconocer pronto el fracaso y cortar sus pérdidas. Toda marca o empresa corre riesgo al fracaso, ya sea de una simple acción como de la empresa o marca en general. Así es el mercado y tenemos que estar preparados y aceptar nuestros fracasos. Por lo tanto para asumir el fracaso hay que saber reconocer y aceptar, cuando ya tocamos fondo.